En estos momentos de la noche en los que me viene la inspiración... no puedo parar de escribir. Es siempre así:
1. Me pongo a escuchar música.
2. Siento la inspiración, como un tipo de mariposas (de esas que se cuenta que se sienten cuando estás enamorada), y necesito plasmarla. Así, sin más.
3. Así que abro el word. Veo el "trozo" de papel... y pum. Es automático.
Un párrafo, dos, tres... o incluso una historia que dejo salir al momento. Es algo muy arraigado en mi interior y algo por lo que no me hace falta esforzarme. Solo yo. Solo el papel. Solo la música.
Pero... ¿y todo lo demás? ¿Por qué no son así de fáciles el resto de cosas? Sí que estaría bien que pudiese apartar lo que en un momento no me apetece pensar o lidiar conmigo misma. Pero la vida no es como el escribir. Y a veces desearía que lo fuese porque los momentos de duda, de pensamientos en los que requieres más tiempo del que deberías... no me gusta lidiar con ellos. Muchas veces me gustaría controlar mis pensamientos, en el sentido de poder apartar algo de mi mente cuando a mí me apetezca. Y volver a desenterrarlo cuando me sienta preparada. Creo que esa es una de las razones por las que a veces soy tan impulsiva... ¿no os pasa? Quizá tengo demasiadas cosas en la cabeza...
PS: Hoy desvarío, estoy segura sobre eso.
PS: Hoy desvarío, estoy segura sobre eso.
Un abrazo para todos,
E.
Escribir es como una especie de terapia, nos ayuda a relegar ciertos pensamientos al olvido durante un rato y a proyectar cosas del subconsciente. Pero el bloqueo también alcanza a la escritura y la duda.
ResponderEliminarÁnimo tati. Estoy deseando leer alguna cosa más de las tuyas.